miércoles, 30 de abril de 2014

El Atleti...ese lujazo de equipo.

Un Atlético emocionante
Nunca he visto en un campo de fútbol un equipo tan comprometido con una idea de fútbol, con un patrón de juego marcado a sangre y fuego por un entrenador que ha vivido los colores del Atlético de Madrid como nadie dentro del terreno de juego.
El Atlético de Madrid es un equipo organizado, disciplinado tácticamente, solidario en todas sus líneas, sin egos personales que trabajan para el colectivo. Viven como equipo, saben que, o viven como colectivo, o morirán como individuos. Esa es la grandeza de este equipazo con mayúsculas. Es una plantilla de hombres comprometidos por una causa, la causa del Atlético de Madrid, por encima de premios individuales, por encima de fichas astronómicas.
Me da muchísima envidia el Atlético de Madrid, su forma de sentir y entender el fútbol, su forma de interpretarlo, con el impulso de una afición que está y ha estado a las duras y a las maduras. Fuera de las fotografías, de las fiestas vip, los jugadores del Atlético de Madrid son un ejemplo de profesionalidad, de hacer las cosas sin aspavientos, de un trabajo sencillo y callado que está a punto de convertirlos en campeones de Europa.
Nada me haría más ilusión que ver al Atlético de Madrid campeón de Europa porque sería el premio a tanto trabajo bien hecho. Se saldaría una deuda histórica que dura más de 40 años, desde aquella mítica final contra el Bayer Múnich.
Lo de esta noche ha sido un monumento al fútbol, a una filosofía futbolística que tiene que ver con el compromiso de un equipo para con su historia y su afición. Ya va siendo hora de ser campeones de Europa, delante del mejor de los rivales posibles: el Real Madrid y toda su historia.
Será un derby apasionante, no apto para cardiacos, una final por mil argumentos inolvidable, que marcará una antes y un después en ambos equipos. Lo viviremos con absoluta pasión. Con ello se pondrá punto y final a la temporada para dar paso al Mundial de Brasil donde, bajo mi punto de vista, Koke, Juanfran, Diego Costa y Villa deberían estar en la lista de convocados de España.
Han sido muchos momentos de duda, de turbulencia, de tempestad, muchos momentos difíciles, incluido en paso por la Segunda División. Ahora el Atleti está en lo más alto del fútbol mundial por derecho propio y es el tiempo de disfrutarlo. Se merece ser campeón de Liga y campeón de Europa. ¡¡¡Nos vemos en Neptuno!!!

martes, 29 de abril de 2014

El camino de la Décima

El Madrid monta un incendio
Soy del Barça pero sobre todo amo el deporte, especialmente el fútbol y, consecuentemente, me gusta ver a un equipo de fútbol creíble, solidario, con el horizonte de poder ganar la ansiada décima Copa de Europa.
Ese es el Real Madrid de esta noche en Múnich y justo es reconocer su mérito, por encima de gustos y pasiones. Ha jugado una eliminatoria seria, estudiada al detalle, donde, además, le acompañó la suerte en los momentos claves de ambos partidos. Enfrente, un Bayer que ha muerto con un estilo de juego que Guardiola ha inculcado a un colectivo de jugadores que se siente más cómodo viviendo con la presión y el contrataque, armas utilizadas la pasada temporada, sobre todo frente al Barça.
Creo que el estilo de Guardiola no encaja en la cultura futbolística alemana pero, quizás, sea ventajista decirlo ahora. También ahora defiendo la vuelta de Guardiola al Camp Nou. Su filosofía de fútbol es el ADN del Barça y le necesitamos más que nunca, sobre todo si el Real Madrid logra ganar la Décima.
Para eso queda una final ante el Atleti o el Chelsea, dos modelos de fútbol que incomodan mucho más al Real Madrid, acostumbrado últimamente a vivir a golpe de contrataque, extraordinariamente bien ejecutado. Morbo no faltará o de la mano de Mourinho o de la mano del Atlético de Madrid.
Me encantaría vivir un derby madrileño y mucho más que el Atlético de Madrid pudiera levantar su primera Copa de Europa frente a su eterno rival.
Antes de todo eso, es de justicia reconocer la labor del Real Madrid y de sus jugadores. Sin levantar demasiado ruido se han metido en una nueva final de Copa de Europa, allí donde no suele fallar. Yo, al menos, no le he visto perder nunca una Copa de Europa, ni cuando ha ido de víctima, ni cuando ha ido de favorito.
Me da la sensación que la Champions le da un plus añadido de motivación y será muy complicado que puedan perder la final. Reivindico la labor de Xabi Alonso, para mí un catedrático del balón, el trabajo serio y reposado de Ramos, la generosidad de Di María, el posicionamiento de Modric, la excelente interpretación del contragolpe de Benzema y Bale y la profesionalidad de Cristiano, en momentos donde el equipo ha agradecido su compromiso colectivo.
Por último, Casillas, un jugador que no ha dicho una palabra más alta que otra, asumiendo que hay compañeros que pueden estar por delante en la preferencia del entrenador, pero nunca perdiendo las formas ni el estilo, aquello que te hace especial, diferente a los demás.
Soy del Barça ý, últimamente, sólo asistimos a funerales deportivos y personales. Yo, que he vivido muchos años de ostracismo, en los que era un acto de heroidicidad ganar una Copa del Rey, sé que volveremos a vivir muchísimas tardes de gloria pero, mientras todo eso sucede, felicidades al Real Madrid que hoy se lo ha merecido más que nunca.

viernes, 25 de abril de 2014

TITO VILANOVA, DEP.

 
Hoy se ha ido, con el silencio y la humildad que siempre le caracterizó, un hombre, un padre, un entrenador, un barcelonista, de nombre Tito Vilanova. Descanse en paz y muchas gracias por habernos hecho un poquito más feliz a muchos barcelonistas que tuvimos el privilegio de ver a nuestro equipo interpretando el fútbol que imaginaste en una cabeza entregada al fútbol escrito con letras de oro, envuelto en blanco satén.
La verdad es que nada importa el fútbol, los títulos, la gloria recibida frente a la rotundidad de la muerte, al punto final de una vida plena donde hizo tan dichosos a tanta gente, desde sus tiempos de jugador en La Masía hasta su responsabilidad como entrenador del primer equipo, con el que ganó la última Liga, con récord histórico de puntos.
Sus títulos y su nombradía quedan empequeñecidos ante la muerte, ante la imposibilidad de seguir alimentando la cadena de afectos como padre, como marido, como vecino, como entrenador de fútbol. Eso es lo injusto de la muerte. Se va un hombre honrado y honesto, un padre de familia, un marido, un hijo, un hermano que no podrá seguir aportando su cariño, su cercanía a todos aquellos cuya presencia era imprescindible.
Tito decía que lo más le preocupaba era sus hijos, que aún le necesitaban como padre. Así es la vida y así la muerte. Un hombre honrado, dicen que cariñoso y humilde, un hombre de distancias muy cortas en las que se veía su grandeza. Es injusto asistir al réquiem por una persona respetada y respetable por todo el mundo que le conoció para darse cuenta que entregó su vida al fútbol y al Barça, su verdadera pasión.
Yo espero que, allá donde esté, pueda sentir estos pequeños homenajes de personas que hoy nos sentimos tristes por su muerte. Sencillamente porque agradecimos todas las tardes que nos dejó de buen fútbol y porque sirvió de guía para otros muchos que, desgraciadamente, deben encarar cada día su lucha contra el cáncer.
Duele mucho asumir que la muerte venció la partida a un hombre joven, con ganas de vivir, de sentir el cariño de toda su gente y la pasión por el fútbol, que lo vivió como un espectador más hasta hace quince días en el Camp Nou. Ahora entristece mucho más saber que su último partido en directo fue la eliminación del Barça en la Champions League, esa competición que él y Guardiola dignificaron con el mejor fútbol que he visto en todos mis años de vida.
Sólo me queda decir gracias, muchas gracias por tu lección de vida y por hacernos felices. Descanse tu alma en paz. Sentido pésame a toda tu familia, que hoy es más grande que nunca, porque cuando se va alguien como tú, lo mínimo es desearte que eternamente puedas ser tan feliz como fuimos nosotros disfrutando de tu futbol.


 
 

miércoles, 16 de abril de 2014

F.C Barcelona, R.I.P

El Madrid entierra a un Barça triste
Duele asistir a una misa de funeral en vísperas de Jueves Santo del equipo que, hasta hace unos meses, emocionaba verle en cada partido. El Barça ha muerto de manera traumática, en una final donde nunca estuvo salvo Marc Bartra, un jugador con aroma de grande.
Irreconocible en todas las líneas, con Messi y Neymar desconocidos, con la mente puesta en el Mundial de Brasil, con un lío táctico de primera magnitud en el que Cesc no se sabe dónde juega y con un Dani Alves pidiendo a gritos la jubilación.
Un panorama desolador, un equipo desbordado por los acontecimientos, por la crisis institucional, por el fin de ciclo que Tata Martino se ha empeñado en acelerar. Duele mucho perder así frente al Real Madrid, otro equipo que andada en la UVI hacia una semana. Es un punto y final a un equipo que marcará una época dentro del fútbol mundial aunque es verdad que en el fútbol no hay sitio para el romanticismo.
Los aficionados somos resultadistas y nuestra memoria no va más allá del último resultado. En este sentido, sí quiero reivindicar tantos y tantos momentos de gloria de esta generación de jugadores que han escrito con letras de oro la historia del club. Su trayectoria quedará en nuestra memoria para siempre pero se debe mirar adelante y ya son muchas semanas que estamos escribiendo esta especie de réquiem por una época que difícilmente se repetirá.
Son muchos interrogantes los que deja este equipo y muchas más las que ofrecen algunos jugadores que piden cada temporada mejoras de contratos sin tener en cuenta su rendimiento en el terreno de juego. Esa espiral de egos, esa mala gestión de vestuario, esa planificación deportiva complaciente con algunas figuras están en la raíz de algunos de los problemas importantes que soporta el equipo.
Ver a Pinto con casi 40 años de titular en una final de Copa, una defensa en cuadro, una dirección técnica pasiva y complaciente no han ayudado precisamente a terminar con fuerza la temporada.
Ahora queda una travesía del desierto con un Mundial como paréntesis de cara a la próxima temporada en el que, a buen seguro, veremos al mejor Messi y al mejor Neymar. Mientras todo eso sucede queda esta semana negra y lamentable en la historia del Barça y esa sensación de volver a tiempos pretéritos donde el discurso victimista era la mejor vacuna para tapar el fracaso colectivo de un equipo que, sinceramente, merecía un mejor final. Descanse en paz.
 

lunes, 14 de abril de 2014

La dimisión de Domenicali y el fracaso de Ferrari


Dice Stefano Domenicali que dimite pero yo creo que lo han dimitido Montezemolo y los acontecimientos deportivos de inicios de temporada, la peor en Ferrari, que se recuerde. Dejarlo cuando se han corrido tres carreras del mundial es reconocer un fracaso palpable y evidente, es saber que el futuro que le espera a Ferrari esta temporada es muy duro.
Ver así a Ferrari ha dolido muchísimo, sobre todo sabiendo que el diseñador de los nuevos motores Mercedes es Aldo Costa, uno de los jefes de ingeniería de Ferrari que Domenicali se encargó de despedir hace apenas tres años.
Se va con un bagaje de dos títulos mundiales a nivel de constructores (2007-2008) y el título individual de Raikonen del año 2007. Escasos argumentos para el mejor equipo de siempre de la Fórmula 1 sobre todo teniendo en cuenta que en las últimas cuatro temporadas tienen al mejor piloto de la parrilla: Fernando Alonso.
Ahora vendrán los ruidos de sables a costa de la planificación deportiva de la temporada. Mientras unos intentarán ver solucione y otros aplicarlas, Mercedes ya tendrá el título en el bolsillo. Así es la vida y así es la Fórmula 1. Tiempos lejanos para la escudería italiana en la que se convivían, no hace mucho tiempo, en el mismo paddock, Ross Brawn, Jean Todt y Michael Schumacher para cosechar cinco mundiales consecutivos.
A pesar de todo ello, el fin de semana deportivo dio para mucho: la victoria sin despeinarse de Marc Márquez en Austin, la exhibición de Miguel Ángel Jiménez en el Master de Augusta y el nuevo monumento al ciclismo: la victoria en la París-Roubaix a cargo del holandés Niki Terpstra. Entre pavés, polvo de carreteras secundarias, pasos de tren a nivel, un público enfervorecido y el sabor a ciclismo épico se celebró una carrera que cada año deja el mejor aroma ciclista de la temporada de la Copa del Mundo. ¿Quién puede pedir más?.
 

sábado, 12 de abril de 2014

El Barça, un equipo en descomposición.


Perder una Liga en Valladolid y Granada va a ser difícil de olvidar para un culé. De mal en peor, con un juego vergonzoso, una actitud deplorable, una suerte lamentable, ésta es la tónica a la que nos tiene acostumbrados este Barça de Martino.
Después de caer como un equipo menor en la Champions League, se presentaba en Granada con el objetivo de mantener su candidatura al título de Liga. Hoy fue un equipo vulgar, una caricatura de sí mismo. Lamentable, esperpéntico, decepcionante, sin argumentos, sin táctica ni alma pasó el Barça por Granada. Y todo ello en vísperas de la final de Copa del Rey contra el Real Madrid, ni más ni menos.
Lo curioso del caso es que, previsiblemente, el Barça gane la final de Copa y quiera maquillar la temporada de esta manera. Va a ser difícil para una afición acostumbrada a comer caviar en las cenas en las últimas temporadas. Esta situación me recuerda al Barça de mis tiempos de niños, a inicios de los ochenta. Nos contentábamos con ganar la final de Copa, con aquel gol de Marcos en escorzo imposible. Y éramos tan felices. Lo malo es que luego llegó la década de los noventa, con Cruyff a la cabeza, y siguió el cambio de siglo con Rijkard y la guinda de la etapa de Guardiola. Los culés nos volvimos exquisitos y así pasa, que no tragamos con lo que nos quieren vender, sobre todo teniendo a Neymar, Messi e Iniesta, tres de los cinco mejores jugadores del mundo.
Así es la vida. Lo bueno es que los culés siempre tenemos motivos para alegrarnos un poco la vida. Para eso está la sección de balonmano y la excelente labor de Xavi Pascual. De su mano hemos conquistado el cuarto título de la Liga Asobal consecutivo. Los Karabatic, Entrerríos, Lazarov, Sterbic, Rutenka y compañía han sabido engrasar un equipo que está llamado a ser el nuevo campeón de Europa. Da gusto verles jugar, con un ritmo sinfónico, un estilo trabajado y una actitud increíble. Sin lugar a dudas es la otra cara de la moneda de un fin de semana para olvidar o, mejor dicho, para recordar cómo no se deben hacer las cosas y de cómo no se puede perder la dignidad futbolística en apenas una semana. Solo espero que el miércoles podamos levantar el título de Copa frente al Real Madrid. Algo es algo.

miércoles, 9 de abril de 2014

Érase una vez el Atleti...

Ballesteros | EFE
Érase una vez un equipo con mayúsculas que está escribiendo con letras de oro, a base de esfuerzo, humildad y trabajo su historia más reciente. Quien diga que un entrenador no tiene gran relevancia que mire al Cholo Simeone y calle para siempre. Un equipo basado en el orden, en una idea creíble de fútbol, en una presión constante, con jugadores muchos de ellos descartados por los presuntos grandes y con una afición increíble. Eso es el Atlético de Madrid y está líder de la Liga y semifinalista de la Champions por méritos propios. Punto final.
En la otra esquina del ring un Barça que no sabe a qué juega a pesar de fichar a jugadores por 100 millones de euros. Un equipo que perdió el estilo para, presuntamente, mejorar sus resultados. Siempre pasa lo mismo, cuando te fallan los resultados no te queda nada. Eso es el Tata Martino y todos aquellos que decían que el estilo debía cambiarse porque el equipo era muy previsible. Manda narices los experimentos con gaseosa. Sin portero, sin defensa, con un medio campo venido a muy menos y una delantera desasistida, eran credenciales muy escasas para vencer a todo un Atlético de Madrid, un equipo de fútbol de verdad, de aquellos que se recordarán por años.
Me encantaría que el Atlético de Madrid fuera campeón de Europa. Representaría mucho entre el resto de semifinalistas, construidos a partir de una holgada chequera. Sería increíble que ganaran la final al Bayer para hacer justicia a la "casi" de Luis Aragonés o al Real Madrid, para demostrarle que en la ribera del Manzanares hay un equipo de fútbol que representa con orgullo a Madrid por el mundo.
Que grande es el Atleti y que grande su afición. Envidia sana para un culé que ha asistido a un funeral adelantado, a un final de ciclo, sin Valdés, sin Pujol, sin el alma del equipo, en suma. Duele recordar los buenos tiempos en la miseria y recordar aquellos tiempos en los que no se daba importancia ir un año sí y otro también a la final de la Champions.
Enhorabuena al Atleti porque hoy dieron una lección de fútbol de las que se tardarán muchos años en ser olvidadas. Espero que sea el nuevo campeón de Europa y que nadie, ni siquiera el destino, pueda apartar de este sueño a toda la afición rojiblanca.

domingo, 6 de abril de 2014

La leyenda del Tour de Flandes

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Cuando llega la primavera los aficionados al buen ciclismo saben que tienen una cita inexcusable con las grandes clásicas del ciclismo. Ya vivimos hace poco la Milán-San Remo donde hace tiempo hubo españoles que se vistieron de gloria (Miguel Poblet, Oscar Freire) y hoy domingo tuvimos el privilegio de vivir una nueva edición del Tour de Flandes, con victoria final para el suizo Fabián Cancellara, quizás el mejor clasicómano en activo del pelotón internacional.
Es una línea más en el palmarés de un ciclista descomunal, dedicado a las clásicas y a la lucha contrarreloj pero sobre todo es un detalle más que contribuye a engrandecer el ciclismo con sus grandes gestas. Es ciclismo del bueno, del que hace afición, de ese que nos enamoramos cuando eramos niños y soñábamos con ser Perico Delgado.
La emoción de la ascensión al mítico muro del Koppenberg, el rodaje entre pavés y multitud de belgas aplaudiendo a rabiar a los ciclistas, los codazos, las pedaladas al límite, contribuyen a crear un ambiente especial en una carrera a la que sólo puede igualar la Lieja-Bastogne-Lieja o la Paris-Roubaix, precisamente ganada el pasado año por el propio Cancellara.
Amo el ciclismo porque como aficionado y practicante fue toda una escuela de vida que remite a ese tiempo de adolescencia donde era feliz, aun sin saberlo, a tantas y tantas tardes y a tantos kilómetros rodados pensando cómo era o cómo sería tu vida. Es mucho lo que representa el ciclismo y es mucho lo que debo a citas ciclistas como el Tour de Francia o el Tour de Flandes. En un fin de semana donde otro de los grandes del atletismo, Bekele, daba el paso en  el Maratón de París para convertirse en el mejor fondista de la historia y donde Ferrari comenzaba a fracasar una temporada más, Cancellara engrandecía su leyenda y con ella la del ciclismo mundial. ¡Viva el buen ciclismo!

jueves, 3 de abril de 2014

La FIFA y el Barça


Está claro que este año el Barça va de sobresalto en sobresalto. Cuando apenas había solucionado su problema con Hacienda en el caso Neymar le ha explotado en toda la cara una noticia que es extraordinariamente peor: la FIFA le sanciona una temporada sin poder realizar fichajes por haber incumplido las normas de fichajes de menores de edad. Honestamente creo que el caso el Barça lo acabará ganando en el TAS, sencillamente porque todos los grandes clubes realizan la misma política de fichajes.
Que el Barça ha incumplido la norma parece evidente, que no ha respetado la literalidad de la misma, creo que es algo que nadie puede cuestionar. Ahora bien, ¿otros clubes europeos tienen la misma política de fichajes sí o no?. Yo creo que sí, entre otras cosas porque, a veces, el Barça no ha podido culminar el fichaje de un joven talento porque se lo habían quedado a última equipos rivales. Por lo tanto, ¿se quiere enjuiciar el modelo de fomento de la cantera de los grandes clubes europeos?. Honestamente creo que no.
Siempre he sido partidario de un principio que está por encima de la legalidad. Es el principio de equidad, esto es, contextualizar el delito en un marco determinado para saber que la comisión del delito puede verse atenuado por circunstancias que no contempla la literalidad de las leyes. Y este es el caso. La norma que dice la FIFA que se ha vulnerado se hizo para evitar el tráfico de niños deportistas, que se les trae a países occidentales y que sino valen para el club se les abandonan a su suerte.
Está claro que clubes serios como Real Madrid y Barça no dejan tirados en la cuneta a los niños que no valen para el primer equipo. Antes al contrario, les facilitan una educación integral y una inserción en la vida cotidiana. Ningún niño es abandonado a su suerte. Y si las cosas son así, ¿por qué esta sanción tan lesiva en los inicios de la planificación deportiva de la siguiente temporada?.
Creo que habrá margen para la negociación y sino lo hay apoyaré que se abran las ventanas y entre aire limpio en el fútbol mundial, a todos los niveles. A todos les irá tocando su turno. Por el momento, me quedo con el modelo de La Masía que ha dejado al fútbol mundial talentos como Messi, Xavi o Iniesta, verdadera poesía futbolística en movimiento. Y que nos quiten lo bailado.

domingo, 23 de marzo de 2014

Messi e Iniesta deciden poner picante a la Liga

Hay partidos que pasan para la Historia del fútbol por su importancia o por su emotividad. Para los culés la victoria a domicilio del Barça en el Santiago Bernabéu dejará huella por mucho tiempo. El equipo venía en estado comatoso y ha salido posicionado para revalidar el título de Liga.
Habría mucho que decir y que debatir pero la actuación de Iniesta y Messi es incontestable. El manchego lleva un mes en pleno estado de forma y comienza a recordar a aquel que lideró a la Selección española en el Mundial de Sudáfrica. Sus goles y su presencia en el campo es espectacular. Vuelve a estar fino y el juego del Barça lo nota. Si a eso se une el olfato de Messi, nos encontramos ante la fórmula perfecta para construir el buen fútbol que ha caracterizado a los culés en el último lustro.
El Real Madrid, por su parte, volvió a dejar señas de su calidad pero sus dos principales estrellas, Cristiano y Bale, no ofrecieron su mejor versión. Y eso, a pesar, de la defensa del Barça, que parece de Segunda División con un Piqué absolutamente desconocido y un Mascherano que hace mucho tiempo que ofreció su mejor versión.
La emoción de la Liga ha vuelto para bien del campeonato, del que es líder el Atlético de Madrid, un equipo que pasito a pasito presenta cada jornada su candidatura al título de Liga sin más argumentos que ofrecer cada jornada hasta la última gota de sudor de sus jugadores.
La vida es un camino de ida y vuelta y en este rondar podemos de disfrutar de un partido de futbol que reengancha al Barça a una Liga que parecía perdida. Esta Liga nos tiene reservadas muchas sorpresa y la de este noche era una de ellas.

jueves, 20 de marzo de 2014

Tras el caso Marta Domínguez, ¿se lucha en España contra el dopaje?

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Por mucho que podamos imaginar, la realidad siempre supera a la ficción. Esta mañana el Comité de Disciplina de la Federación Española de Atletismo ha absuelto a Marta Domínguez de dopaje con referencia a la alteración de los parámetros en el pasaporte biológico de Marta en el año 2009, fecha en la que se proclamó campeona del mundo de 5000 metros.
Y se han quedado tan anchos. Esta noticia directamente es un escándalo deportivo por cuanto la propia Federación cuestiona la validez de una prueba que se ha asumido como certera por todas las federaciones internacionales, incluido el propio Comité Olímpico Internacional.
Claro que con las declaraciones previas realizadas por José María Odriozola, presidente de la Federación y del propio Alejandro Blanco, presidente del Comité Olímpico Español, se sabía la decisión de antemano. Lo curioso es que Blanco es el mismo personaje que defendió en Buenos Aires, en la elección de Madrid como ciudad candidata a los Juegos de 2020, las virtudes de la legislación española contra el dopaje. Su discurso fue tan falso que no se lo creyó nadie, y ese fue el principal argumento para rechazar la candidatura madrileña. Ni más ni menos.
Lo gordo de este caso de Marta Domínguez es que, muy probablemente, el TAS acabe sancionando a la atleta palentina. Sería un caso más, después de los episodios de Alejandro Valverde y del propio Alberto Contador. Así las cosas, ¿con quién se pretende quedar el COE para decir que España lucha contra el dopaje?. Conmigo no. La semana pasado Pentinel, otro de nuestros grandes atletas, se veía involucrado en una operación de tráfico de sustancias dopantes. ¿Cuánto más desprestigio debe soportar nuestro deporte?. La respuesta es clara y sencilla: si queremos un deporte creíble debemos ser ejemplares en la lucha contra los tramposos.
Fui el admirador número uno de Marta Domínguez pero me sorprende mucho que se haya visto envuelta en dos escándalos de dopaje y haya salido inmaculada de ambos. Se supone que en el TAS, donde no hay una mano política que presiona el dictamen, se hará justicia definitiva a un caso de dopaje que involucra en su prestigio al presidente del Comité Olímpico Español.
Señor Alejandro Blanco, cuando vaya usted por el mundo hablando de limpieza y de legalidad, tápese un poquito, porque le pueden sacar unos cuantos cadáveres del armario. Y después, cuando al deporte español le señalen con el dedo, cada palo que aguante su vela, porque algunos van a tener que soportar sobre sus costillas el cirial de la Catedral de Toledo.

martes, 18 de marzo de 2014

Alberto Contador, en plena forma

Podio final de la Tirreno-Adriático 2014
¡Enhorabuena para Alberto Contador!. Hace dos años que el pinteño no ganaba una carrera por etapas y lo ha ido a realizar, ni más ni menos, que a la Tirreno-Adriático, la prueba más prestigiosa por etapas del inicio de la temporada ciclista. Lo ha hecho con solvencia y determinación, por delante de Nairo Quintana, la gran promesa colombiana que asombró al mundo ciclista el año pasado en el Tour de Francia.
Esta claro que Contador ha entrenado duro este invierno, quizás a sabiendas de que su máximo rendimiento como ciclista tiene ya fecha de caducidad. Son miles de batallas a las espaldas de Contador, miles de guerras libradas en las grandes vueltas por etapas. Quizás este año sea el último que afrontará con garantías de ganar el Tour con el permiso de Froome y de la armada española de Valverde y Purito Rodríguez.
Quizás este año Contador haya cambiado su estrategia de preparación para afrontar el Tour o quizás haya vuelto la mejor versión de Contador, un ciclista a la vieja usanza, que cree en la gesta del demarraje a decenas de kilómetros de meta. Sin lugar a dudas es un ciclista de grandes esencias, de etapas memorables que poco a poco se han ido diluyendo conforme avanzaba su carrera deportiva.
Era el sucesor natural de Induráin en la mente de todos los aficionados al ciclismo pero , poco a poco, fue perdiendo su identidad de ciclista valiente y combativo. Lo hizo justo después del paréntesis forzoso en su carrera deportiva debido al dopaje por Clembuterol que le fue detectado. La sanción de dos años por dopaje fue un golpe muy duro para Contador y para el ciclismo español.
Yo sentía una admiración infinita por Contador, por su historia personal de superación de una enfermedad que padece desde hace años, por su forma de ver y entender el ciclismo como lo hicieron todos los grandes campeones españoles, desde Vicente Trueba hasta Oscar Freire. Firmaba cada triunfo en formato de gesta de un hombre que se superaba constantemente, que prometía batir todas las marcas de triunfos en grandes vueltas. Eso emocionaba mucho, sobre todo cuando atacaba en la montaña, en las grandes citas del Tour de Francia. Nos privó de muchas siestas, a cambio de una emoción infinita.
Todo eso hasta que estalló el caso de su dopaje. A partir de ese momento su crédito está en tela de juicio. Como decía Nietzsche, "no es que me hayas engañado, sino que jamás volveré a confiar en ti". Tendrá que darnos muchas semanas como ésta de la Tirreno-Adriático para volver a confiar en él. De momento ha hecho que podamos volver a soñar con ganar el Tour de Francia, y eso son palabras mayores. A pesar de todo y por encima de todo me gustaría ver a Alberto Contador en lo más alto del pódium del Giro o del Tour de Francia. Pensaremos que es el hijo pródigo que ha vuelto a casa tras años de ausencia. El ciclismo español lo necesita más que nunca. Esperemos que la Tirreno-Adriático sea el preámbulo de una temporada de ensueño. Yo apuesto por ello. 
 

domingo, 16 de marzo de 2014

Decepcionante inicio de temporada de Ferrari

Fórmula 1: Fernando Alonso quinto en el GP de Australia
La vida sigue igual para Ferrari y para Fernando Alonso. Nueva temporada, ilusionante proyecto, pero llega la primera carrera y los bólidos rojos quedan relegados a medio segundo por vuelta de la cabeza. El año pasado era Red Bull y Lotus, este año Mercedes y McLaren y así un penoso y largo etcétera a lo largo de las cinco temporadas que lleva pilotando Alonso en Ferrari.
No consuela saber que Hamilton y Vettel se retiraron, ni que eliminaron a Ricciardo. Estos tres pilotos cuentan en pista con un mejor coche que Alonso para decepción de los millones de aficionados de Ferrari. Para mi fue tan decepcionante que el propio McLaren, desahuciado al final de la pasada temporada presenta un mejor rendimiento que la escudería Ferrari.
Espero que sea algo puntual y que en los próximos grandes premios se vaya viendo una evolución positiva del coche, quizás cuando la competición llegue a Europa. De lo contrario estaríamos en la enésima desilusión del que a priori es el mejor binomio de la parrilla: Alonso como piloto y Ferrari como escudería.
Recuerdo mucho los tiempos de Brown, Todt y todo el carrusel de ingenieros con los que ya no cuenta Ferrari. Ver a Raikkonen y Fernando Alonso peleando su posición con los Williams es sencillamente desalentador. Y eso, a pesar, que el final de la pasada temporada se tiró a la basura para preparar el coche para el inicio de esta.
No me gusta este año la Fórmula 1 con sus coches silenciosos, escasos de potencia, feos de diseño. Muchos cambios pero la mayoría para peor. La única ilusión era ver a Fernando Alonso luchando por la pole y por la carrera, pero nuestro gozo en un pozo. Esperemos que haya sido un fenómeno puntual de un circuito semiurbano como el de Melbourne. Lo único positivo es esa cuarto puesto que suena a música celestial después de haber notado la impotencia de Ferrari en pista.
La vida sigue igual, a nuestro pesar...

martes, 11 de marzo de 2014

Grande Atlético de Madrid


Una de las pocas cosas positivas de ir cumpliendo años es que vas viendo todas las cosas con perspectiva histórica. Disfrutar del partidazo del Atlético de Madrid frente al Milán es algo grande pero sí lo comparas con los años de absoluta sequía en Europa del equipo rojiblanco es algo absolutamente orgiástico.
Uno que ya va teniendo sus años y que creció con la grandeza del Milán de Sacchi y Capello, valora muchísimo más que el Atlético de Madrid le haya dado un auténtico repaso en el partido de ida y en el de vuelta.
Simeone ha cambiado el discurso victimista del "pupas" por otro en el que se habla de grandeza, heroidicidad y visualización de grandes títulos. Ése es el verdadero salto cualitativo del Atlético de Madrid y eso es lo que se sintió en el Vicente Calderón frente al Milán de Seedorf. Ahora el Atleti es un equipo creíble, organizado, seguro, que sabe a lo que juega y que mueve sus piezas a la perfección.
Con estos argumentos se ha presentado en cuartos de final de la Champions y encara con posibilidades el final del Campeonato de Liga. Ahora se juega y se vive como un equipo solidario, humilde, sin altanerías, sin egos personales que puedan engullir al colectivo. Da mucha envidia ver un equipo así, hecho de muchos descartes de otros equipos grandes que Simeone ha sabido extraerles su jugo.
Me gustaría que el Atleti hiciera algo de verdad, por ejemplo ganar la Champions, y ofrecérsela a Luis Aragonés, que la acarició en aquella histórica final de 1974 contra el Bayer Münich. Sería el éxtasis y la consecuencia lógica de tanto trabajo bien hecho, del compromiso de un grupo de jugadores que dejan todo y más en el campo.
Como digo, si tienes perspectiva histórica y comparas esta temporada con la mediocridad de otras tantas precedentes, si lo haces sabiendo que tu rival de octavos era el Milán de las 7 copas de Europa, no puedes por menos que disfrutar de un momento grande en la historia del Atlético de Madrid.
Este equipo está escribiendo con letras de oro la historia del club. Me alegro por ellos. La afición colchonera se merece como nadie tardes de gloria como ésta, de esas que no se olvidarán tan fácil. ¡¡¡Aupa Atleti!!!.

martes, 4 de marzo de 2014

Adiós e infinitas gracias a Puyol, el eterno capitán.


¡Qué dignidad personal y profesional se condensa en este jugador eterno e inolvidable!. Se llama Carles Puyol y los que nos sentimos culés y españoles hemos tenido el privilegio de disfrutar en los últimos quince años, desde aquel día, allá por 1999, cuando Louis Van Gaal, entonces entrenador del Barça le hizo debutar en Valladolid, hasta el pasado domingo en el que marcó un gol en el Camp Nou frente al Almería.
Siempre fue mi jugador favorito porque en él se condensaba todos los valores que encajan con mi filosofía de vida: esfuerzo, profesionalidad, humildad, compromiso y lealtad. No creyeron en él demasiado en las categorías inferiores del Barça, donde empezó como delantero centro pero siempre vieron en él un líder que no defraudaría a nadie. Acabó como lateral derecho y allí debutó en la época donde Michael Reiziger era el dueño de la banda derecha azulgrana.
Pronto, el entrenador se dio cuenta que era imprescindible para el equipo y para el vestuario. Afinó su técnica y ganó en seguridad hasta convertirse en el central titular indiscutible en la zaga azulgrana y en la Selección española. Sus números son incontestables: 100 partidos internacionales con España, campeón del Mundo, de Europa, casi 600 partidos con el Barça, campeón de Liga, de Europa, de Copa, del Mundialito de clubes, premios individuales y así un largo etcétera que ocuparían páginas y páginas.
Yo me quedo con su humildad, con no olvidar sus raíces, sus orígenes humildes, por haber llevado unos colores tan dentro hasta convertirse en su capitán y abanderado, con su capacidad para superarse, lesión a lesión, por haber entendido el fútbol con una dignidad infinita, incluso el día que anuncia su retirada del Barça y de la Selección española.
El guerrero pide un descanso para meditar antes de continuar la batalla en otros lugares, quizás desde su retiro definitivo. Todos tenemos muy claro cómo le recordaremos y porqué le recordaremos. Sobre todo lo haremos porque en él nos vimos representados, por encima de sus goles, escasos pero decisivos, por encima de haber sido durante varios años el mejor central del mundo.
Era un chaval del pueblo que un día soñó con vestirse de culé y ganar títulos con su club y con su país. Y no sólo que lo soñó sino que hizo posible su sueño, con mucho trabajo, con mucha abnegación, con un sacrificio infinito. Él pudo hacer el sueño posible, el mismo que tuvimos muchos niños. Por eso, cuando le veíamos, amábamos tanto su fútbol, porque tuvo la dignidad de soñar y de hacer realidad sus sueños, a pesar de haber pasado momentos de dudas, turbulencia y tempestad.
Siempre seré de Carles Puyol. Me sabe mal que no pueda estar con España en Brasil, donde él hubiera dado de nuevo su vida por alcanzar el título más grande al que puede aspirar un futbolista. A veces la vida es ingrata, pero él lo dignificó todo, incluso su adiós, humilde, sin extravagancias, sin protocolo.
Como culé y como español, infinitas gracias por todo.
 

viernes, 28 de febrero de 2014

Hacienda y el Barça

Foto de portada
Se juega como se vive. Es un máxima del fútbol que se cumple equipo a equipo. Clubes saneados económicamente, con paz en el vestuario y un entrenador coherente, hacen buenas temporadas. Clubes nerviosos por la zozobra del momento económico o deportivo, equipos titubeantes, ciclotímicos.
Éste es el Barça del momento: un presidente dimitido, un escándalo hacendístico de primer nivel, un entrenador que no comulga con el "tiki-taka" culé de los últimos veinte años y sus dos estrellas, Messi y Neymar, más pendientes de su bufete de abogados de lo que pasa en el terreno de juego. Este es la vida del Barça y así se refleja en el campo. Un día ganan a domicilio al líder de la Premier y, al otro, firman el partido más ridículo en años.
Como dicen "si sale con barbas San Antón y sino la Purísima Concepción". Los culés no sabemos a qué atenernos. Igual soñamos con la Copa de Europa como que temblamos hacer el ridículo en la final de la Copa del Rey frente al Real Madrid. Éste es nuestro estado de cosas, con el Ministerio de Hacienda haciendo su trabajo, el juez Ruz el suyo y Rosell huido sin más explicaciones que un cobarde hasta luego.
Hacienda somos todos y todos debemos pagar nuestros impuestos con proporcionalidad, incluidos los clubes de fútbol que se creían que estaban por encima del bien y del mal. Si a ello se une la acción de un socio que, por su cuenta y riesgo, levanta las alfombras y se ve la mierda a kilómetros, el panorama se convierte en desolador.
Soy partidario de abrir las ventanas para que circule aire fresco por los clubes de fútbol, de sus fichajes, de sus traspasos, de las comisiones que se llevan muerto los representantes, de las deudas a la Seguridad Social. Entremos de lleno, sin prejuicios ni distingos, para poder ver lo que se esconde tras las bambalinas.
Yo espero que se depuren todas las responsabilidades civiles y penales, si las hubiera, en el caso Neymar y en el caso Messi y, de paso, que se protocolice para el futuro la contabilidad de los clubes que, salvo cuatro, el resto son sociedad anónimas. Estar bien con Hacienda es de obligado cumplimiento para todos. Que se aceleren esos expedientes que, en otros casos, acumulan montañas de polvo en juzgados de instrucción y delegaciones de Hacienda y pongamos las cartas encima de la mesa.
Cuando eso suceda, en el caso del Barça, volverá la paz institucional que tanto necesita el club. Será el momento de centrarnos en el fútbol, en el deporte, que es lo verdaderamente que nos interesa a la mayoría de aficionados. Al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios.

lunes, 17 de febrero de 2014

Renaud Lavillenie destrona a Sergei Bubka como mejor pertiguista de la historia

Una lesión deja a Lavillenie sin Mundiales de pista cubierta
Hay dos o tres marcas mundiales que estaban pendientes de batir desde hace décadas. Quizás el más difícil de batir era el récord mundial de pértiga de Sergei Bubka que dejó el listón sobre 6,15 hace más de veinte años.
Fue en su día un récord sideral e inalcanzable para cualquier humano que no fuera Bubka, el afamado atleta ucraniano cuatro veces campeón del mundo, campeón olímpico, campeón de Europa y poseedor de una veintena de records mundiales en sala y al aire libre.
Fíjense por donde, un francés muy menudo que mide 1,76 de altura y pesa 70 kilos, este fin de semana era el encargado de batir en la propia ciudad natal de Bubka el récord más prohibitivo del atletismo contemporáneo. Ahora el listón queda en 6,16, una auténtica brutalidad de marca, sobre todo en un tiempo donde la lucha contra el dopaje está más rigurosa que nunca.
Así es la vida. Tuvo que venir un francés, profesional como nadie para arrebatarle a Bubka el título de mejor pertiguista de la historia. Lavillenie es campeón del mundo y olímpico y solo le queda este título para cerrar su marcha triunfal en el salto de pértiga.
En su día cayó el récord de Bob Beamon en longitud, el de 1500 de Sebastian Coe, los 200 metros lisos de Michael Johnson o los 400 metros vallas de Edwing Moses. Quizás éste el gran récord masculino que quedaba por batir en el siglo XXI, además de los 2,45 de Sotomayor en altura, y ha sucedido de la manera más inesperada.
Ahora quedan las plusmarcas femeninas de Florence Griffith en 100 y 200, los 400 de Marita Koch, los 2,09 de Kostadinova, los 800 metros de Katrochilova o los 1500 de Wang Junxia, todas ellas realizadas en un tiempo en el que el dopaje campaba a sus anchas.
Sin lugar a dudas ha sido un buen fin de semana para el atletismo francés. No todos los días se superan marcas de esta naturaleza, Han pasado 20 años y para quien vimos por televisión el anterior récord, la verdad es que el tiempo ha pasado muy rápido. Ya dijo García Márquez que uno empieza a ser viejo cuando cuenta cosas que sucedieron hace más de veinte años...y no digo más.

sábado, 15 de febrero de 2014

Medalla de chocolate


Javier Fernández, durante el programa libre.
Si hay una medalla dolorosa de ganar es la de chocolate, aquella que simbólicamente se llevan aquellos deportistas que acaba cuarto. Cierto que se llevan diploma olímpico pero no es menos cierto que se quedan a un escalón de la gloria del pódium.
Javier Fernández tuvo un error de bulto en la final, penalizado con cuatro puntos, que le costaron el bronce. Tenía una coreografía adecuada, un ejercicio que y le dio el oro en el pasado europeo y las ganas de haber sumado su primera medalla olímpica. Pero falló donde nunca suele hacerlo y le condenó a la cuarta plaza.
No hubo margen ni siquiera para una reclamación porque el error de querer cambiar la ejecución de su ejercicio sobre la marcha fue demasiado cantoso para unos jueces rigurosos como son los que puntúan todas las pruebas técnicas de un programa olímpico.
Era nuestra última esperanza de conseguir medalla en los Juegos Olímpicos de Sochi toda vez que Carolina Ruiz se volvió a caer en la prueba del Supergigante, al igual que lo hizo en descenso. Es un escaso bagaje para una Selección española que partía con posibilidades de dar una alegría a la afición española después de 22 años de sequía.
Queda mucho trabajo por hacer pero el panorama de los deportes de invierno en España es desolador. Sin apenas patrocinio ni becas del COE, nuestros deportistas tienen que buscarse la vida como pueden entrenando en países extranjeros donde hay cultura deportiva de deportes de invierno.
Yo esperaba algo más de Sochi pero como decía Calderón de la Barca, "la vida es sueño y los sueños, sueños son".
 
 

domingo, 9 de febrero de 2014

Comienzan los Juegos Olímpicos de Sochi

Mayer, exultante en el podio
Primer fin de semana de los Juegos Olímpicos de Sochi 2014. En un país como España la celebración de unos Juegos Olímpicos de invierno pasan desapercibidos porque, a lo largo de la historia, apenas hemos logrado dos medallas, ambas de la familia Fernández Ochoa. Sapporo 1972 y Alberville 1992, con el oro de Paco Fernández Ochoa y el bronce de su hermana Blanca Fernández Ochoa quedan demasiado lejos como para haber creado una afición en nuestro país.
El episodio lamentable de Johan Mühlegg en los Juegos de Salt Lake City de 2002, donde fue descalificado por dopaje tras cosechar el oro en 50 km de esquí de fondo no contribuyó, precisamente, a prestigiar los deportes de invierno en España. Pese a todo Jaca ha organizado dos veces su candidatura a ser sede olímpico e, incluso, Barcelona se lo planteó este verano.
De momento los Juegos más caros de toda la historia olímpica han comenzado con la celebración del descenso, el patinaje de velocidad y el patinaje artístico y con toda la polémica recogida por las leyes homófobas rusas.
Me gusta el deporte, independientemente de su formato, por eso también me gustan los Juegos de invierno y si es disfrutando con una medalla de Javier Fernández o de cualquier otro deportista español mejor que mejor. Por el momento hemos disfrutado del descenso y del oro de Maier. Como aperitivo no ha estado nada mal.
 

sábado, 1 de febrero de 2014

Luis Aragonés, el "Sabio de Hortaleza". D.E.P



Hoy se ha ido uno de los tres o cuatro personajes más importantes de nuestro fútbol. Se llamaba Luis Aragonés, apodado "el Sabio de Hortaleza" y contaba con una legión de seguidores, entre los que yo me encuentro. Descanse en paz.
De toda la vida fui de Luis Aragonés porque tengo el recuerdo como culé de aquella Copa del Rey de 1988 tras el motín del Hesperia en el que Luis apoyó a los jugadores frente a Nuñez. El Barça estaba en crisis y Luis nos regaló una Copa. Una Copa importante sí, pero más importante fue la Eurocopa que Luis regaló a nuestro fútbol cuando más lo necesitaba.
De toda la vida nos veníamos de las grandes competiciones en cuartos  hasta que Luis consiguió cambiar esa inercia, llevando a nuestras vitrinas la segunda Eurocopa de nuestra historia. Tuvo la inteligencia de renovar la Selección apartando a Raúl y dándole el relevo con Fernando Torres, Iniesta, Villa y todos los jugadores que nos han llenado de gloria en el último lustro.
El fue el iniciador de una etapa escrita con letras de oro que todavía continúa. Sabe muy mal pensar que el no verá a una España campeona en el Mundial de Brasil pero así de injusta es la vida. Muchos no tenían ni idea del avanzado estado de su enfermedad, por eso la noticia ha sido tan impactante.
Se merece un millón de homenajes de todo el futbol español, del Atlético de Madrid, del Barça y del resto de equipo que entrenó con maestría. Quizás sea el atlético más ilustre de toda su historia por su maestría como jugador, como entrenador, como hombre que sentía los colores de una manera auténtica pasional y auténtica hasta el punto de renunciar a entrenar al Real Madrid. Lo hizo por principios, a pesar de las ofertas que Mendoza o Florentino le hicieron llegar en su día.
Luis era así, un personaje de la cabeza a los pies al que sus jugadores idolatraban por su trato personal, por ser su mejor motivador, su mejor psicólogo. Llamaba a todos de usted, cuando decían los que le trataron que fue una persona humilde y supercordial en las distancias cortas.
Su relación con la prensa fue difícil, pero lo fue porque fue un hombre de gran personalidad que no se casaba con nadie. Entendía el fútbol como la vida. De hecho él era una escuela de vida. Lamento mucho su pérdida porque siempre fui un fanático de su forma de entender el fútbol.
Desgraciadamente no pude conocerle como persona cuando era redactor de la Cadena SER, aunque me contaron algunos que le conocieron que era un auténtico lujo trabajar a su lado. Era muy amigo de sus amigos, colchonero a muerte y, sobre todo, un español que dio a su país el prestigio y la nombradía que muchos no soñaran hacerlo en un millón de años, a pesar de gastarse millones en publicidad de la "Marca España".
El era un español que ejercía como tal y, en su ejercicio, prestigió siempre nuestro fútbol. Ojalá Luis Aragonés pueda ver todos aquellos halagos que muchos le negaron en vida. Este verano, seguro, que disfrutará del Mundial de Brasil con una Selección Nacional que él transformó para colocarla en la cima del fútbol mundial.
Descanse en paz y que su legado no muera nunca. Es el mejor homenaje que podremos hacerle aquellos que sentimos por él admiración personal y profesional. Hoy se ha ido uno de los grandes de nuestro deporte. Se llamaba don Luis Aragonés.

viernes, 31 de enero de 2014

La dignidad de los jugadores del Racing de Santander


Anoche, en el Sardinero vivimos uno de los momentos más dignos del futbol español en años. Un colectivo de futbolistas que se ganan la vida como mejor saben y pueden, de una manera digna, dando lo mejor de ellos mismos, se plantó en el partido de cuartos de final de Copa del Rey que les hubiera enfrentado a la Real Sociedad.
Fue un acto que tenía que ver con la dignidad personal de trabajadores del balón que piden una cosa tan justa como sencilla: que les paguen el salario con los que mantienen a su familia. No estamos hablando de contratos millonarios, sino de mileuristas, víctimas de una crisis económica brutal que nos ha dejado como herencia la agresión constante a las condiciones laborales de todos los asalariados.
El conflicto del Racing sintetiza el peor rostro de la crisis económicas: trabajadores que siguen dando el callo, con menor sueldo y peores condiciones laborales mientras los gestores ni son censurados, ni dimiten, ni asumen la responsabilidad de su mala gestión económica. Es el caso del Racing, un club histórico de Primera División que corre serio riesgo de desaparecer o pasar al más absoluto ostracismo como sucedió con el Oviedo, Salamanca y tantos otros equipos que pertenecen a la memoria colectiva de nuestro fútbol.
No hay nadie en España que pueda dar la razón a la directiva del Racing y sí todos a sus jugadores que, sin cobrar, con viajes imposibles eliminaron a dos equipo de Primera División y tenía posibilidades de haber eliminado a un equipo Champions. En semifinales le esperaba el Barça y quizás la solución económica a los problemas del club pero los jugadores apostaron por su dignidad personal y como jugadores de fútbol.
Su lucha, su reivindicación hoy es motivo de comentario en toda la prensa mundial para vergüenza de una directiva a la que no le queda otra que dimitir y hacer las maletas. Anoche todos fuimos un jugador del Racing más porque en su lucha estaba la de todos los trabajadores que, a cambio de nuestro trabajo, pedimos nuestro salario, algo perfectamente asumido desde tiempos pretéritos salvo en la mente obtusa e impresentable del presidente del Racing de Santander y sus atláteres.
 

La leyenda del VI Naciones de Rugby


Este fin de semana comienza, bajo mi punto de vista, una de las citas más emotivas del deporte mundial. Soy un absoluto fanático del rugby, un deporte de villanos jugado por caballeros, según un antiguo proverbio inglés. El ambiente es, sencillamente, espectacular. Estadios llenos, con ganas de disfrutar de partidos que se abren con la interpretación de los himnos nacionales. Todo pertenece a un ritual de viejas y grandes esencias donde el deporte cobra su verdadero significado: la superación, la competencia sana, representar a un país al que sientes muy dentro. Luchar en un campo de juego para reivindicar un sentimiento nacional unívoco, sin ambigüedades. Ese es el VI Naciones y esa es la verdadera envidia que sentimos españoles cuando suena nuestro himno, sin letra, sin la intensión emotiva que se escucha en el VI Naciones. Una juego, un sentimiento, un país que alienta a sus deportistas porque les representan de una manera dignísima. Por eso siento verdadera admiración del VI Naciones, al margen de sentirte más o menos patriota.
Me encanta este deporte y siento muchísimo que España nunca haya tenido el suficiente nivel competitivo para pelarse con las grandes potencias del rugby mundial. Australia, Nueva Zelanda, Sudáfrica y los integrantes del VI de Naciones tienen un nivel superior a España pero eso no quita que en la piel de toro haya gente que vibre, que se emocione con cada partido del VI Naciones. Ver su protocolo, sus himnos, la tensión competitiva me dice mucho porque siempre este torneo me dejó huella.
Al final del cuento somos una síntesis de lo que hemos vivido previamente. Amo al deporte porque he amado mucho deportes como el rugby, he pasado grandes ratos y otros tantos que me quedan por ver porque sueño algún día con ver un Escocia-Inglaterra en Murrayfield. Es una suerte poder disfrutar un año más de una competición deportiva que lleva celebrándose desde 1883 en distintos formatos.
 Haciendo un poco de historia, el primer partido entre dos países de rugby se dio entre Inglaterra y Escocia en 1870. Técnicamente no fue Escocia, sino un combinado del resto de países que integran las islas británicas. A partir de ese momento, los equipos de las islas se pusieron de acuerdo para disputarse por lo menos un partido de rugby al año en lo que se conocen como Copas. Dentro del propio torneo se disputan varias competiciones parciales:
- Calcuta Cup. Se le denomina así al enfrentamiento entre Inglaterra y Escocia. Fue el primer enfrentamiento internacional que se dio entre países del Hemisferio Norte, en 1870 y fue la antesala al VI Naciones. 
- Centenary Quaich. Se trata del enfrentamiento particular entre Escocia e Irlanda. Se empezó a denominar así en 1989, coincidiendo con el centenario del primer partido que disputaron ambos países.
- Millenium Trophy. Se trata del enfrentamiento entre Inglaterra e Irlanda. Se le denomina así desde 1988 y homenajea el milenio de la fundación de Dublín.
- Copa Garibaldi. Se le denomina con este nombre al enfrentamiento entre Francia e Italia desde el año 2000, coincidiendo con el segundo centenario del nacimiento de Garibaldi.
Al final del torneo se pueden conseguir tres premios:
- Triple Corona. Se conoce al ganador de la Triple Corona como el equipo que ha ganado al resto de las Home Unions (IV Naciones). En la época del IV Naciones, al ser exclusivamente británico, no tenía sentido hablar de Grand Slam.
- Grand Slam. El ganador del Grand Slam es aquel equipo que gana todos los partidos. En los años del IV Naciones el ganador de la Triple Corona era el mismo que el del Grand Slam, pero tras la inclusión de Francia y luego Italia, la Triple Corona se quedaba corta, y era preciso introducir otro término.
- Cuchara de Madera. Se le designa como el ganador de la Cuchara de Madera al último clasificado del torneo, independientemente de si ha ganado algún partido o no. Este término proviene del rugby en sus orígenes, ya que cuando se enfrentaban las universidades británicas, los últimos se llevaban la cuchara literalmente. En caso de que el equipo haya perdido todos los partidos, se dice que ha sido “outwashed”, así que se confirma la Cuchara de Madera de Francia en 2013.
Ya saben todos los amantes del rugby. Comienza este fin de semana y la cita es inexcusable.
 
 

martes, 28 de enero de 2014

El balonmano español cumple sus expectativas.

Un bronce de campeones
Me gusta el balonmano, quizás mi deporte colectivo favorito. Siento verdadera pasión por un deporte que practiqué hace casi 20 años y siento fascinación por ver, en televisión o en directo, la práctica deportiva de un deporte que combina técnica con estrategia colectiva. Recuerdo montón de momentos históricos del balonmano mundial: la final europea del Atlético de Madrid contra la Metanoplástika, las 8 copas de Europa del Barça, en especial la primera con Vujovic como estrella azulgrana, las finales olímpicas de la antigua URSS o los dos títulos mundiales de España. 
Son recuerdos que forman parte de tu lado más íntimo porque los viviste con especial emoción. El balonmano me transmite muchas cosas y cuando esos momentos los protagoniza el Barça o la Selección española la alegría es más intensa. Por eso he disfrutado como un enano del Europeo celebrado en Dinamarca. España cumplió con un bronce, ganado a pulso ante Croacia.
No es un mal saldo de la actual campeona del Mundo, toda vez que estrenábamos seleccionador. Manolo Cadenas ha cumplido en su primera gran cita con la Selección española. Mantuvo el bloque del Mundial de España a excepción de Sterbik, lesionado, Alberto Entrerríos, retirado y Aitor Ariño que fue sustituido por Cristian Ugalde. A cambio volvió a la Selección Raúl Entrerríos, el citado Ugalde y nuestra promesa en la portería, Gonzalo Pérez de Vargas.
Destacable fue la labor de Joan Cañellas, un jugador de raza que se gana la vida en el Hamburgo y Julen Aguinagalde, incorporado en la fase final del campeonato con un rendimiento impresionante. Nos faltó suerte con Francia, apenas detalles para haber eliminado a una de las mejores selecciones de la historia con el azulgrana Karabatic como eterno capitán. Estuvimos a un paso de la gran final ante una Dinamarca decepcionante. Jugaban en casa pero no les sirvió para anotarse la medalla de oro, a pesar del gran rendimiento de Mikel Hansen, quizás el mejor jugador del mundo con el permiso de Karabatic.
Ahora cuando se ha cerrado el telón es momento de pensar en el futuro de un deporte que está muriendo por momentos. La Asobal ya no es la mejor liga del mundo. Es una liga donde hay un equipo, el Barça que gana sin despeinarse todos los partidos, y punto final. Desaparecido el Atlético de Madrid, la liga Asobal ha quedado a merced de la dictadura del Barça, bajo mi punto de vista, el mejor equipo del mundo en la actualidad.
Esta misma mañana, se ha hecho público que se cambiarán las normas de nuestra Liga para potenciar la participación de jugadores españoles. Para ello se limitarán a cuatro los extranjeros por plantilla, una muy buena noticia para el futuro de nuestra Selección. No puede ser que Cañellas, Rocas, Aguinagalde, Sierra, Valero Ribera, Gedeón Guardiola, Antonio García o Jorge Maqueda hayan tenido que hacer las maletas para ganarse la vida fuera de nuestro país.
Necesitamos de buenos jugadores para el futuro y la manera de conseguirlos es tener una Asobal competitiva. Fuera de todo ello, me quedo de nuevo con la selección de Francia, una auténtica sinfonía de hacer balonmano con Karabatic, Omeyer, Narcisse, Givou, Abalo, Fernández o Sorhaindo de figuras estelares. Esperemos que España, muy pronto, en los Juegos Olímpicos de Rio pueda conquistar el oro olímpico. Ganas no faltarán en un colectivo de jugadores que merecen nuestro más sincero reconocimiento.

jueves, 23 de enero de 2014

Sandro Rosell

<span class=l1>Sandro Rosell presenta su dimisión acorralado por el caso del fichaje de Neymar</span>
Nunca son buenas noticias cuando dimite el presidente del club de tus amores en circunstancias extrañas. Pasó de pedir el lunes al juez Ruz que admitiera la querella a trámite a dimitir de manera irrevocable tres días después, sin dar explicaciones al socio y a los aficionados.
Siempre me pareció peculiar la pareja Laporta-Rosell, forjada desde la infancia. Ambos planificaron desde la oposición a Núñez y Joan Gaspart el acceso a la presidencia del FC.Barcelona. Una vez llegaron al poder, comenzaron los enfrentamientos hasta convertirse en enemigos irreconciliables. Deportivamente fue una presidencia excelente. Fue la época de Rijkaard y posteriormente de Guardiola, en la que se ganaron dos Copas de Europa, un Mundialito de clubes y unas cuantas Ligas y Copas del Rey. En este período, la afición culé tuvo el privilegio de disfrutar de Ronaldinho, Deco, Ibrahimovic, Etoó y la explosión de canteranos culés como Busquets, Iniesta o Piqué.
Después Laporta se fue y le sucedió Rosell, después de haber sido su más férrea oposición, desde el momento que dimitió como vicepresidente de la Junta presidida por Laporta en 2006. Consiguió el 60% de los sufragios e inicio otra etapa deportiva brillante, en la que consiguió otra Copa de Europa, otro Mundialito de clubes y la Liga de los 100 puntos.
La gestión deportiva fue interesante pero su gestión económica y política dejaron mucho que desear. El club se identificó más que nunca con los valores del nacionalismo catalán, se apartó a Cruyff de la presidencia de honor y la gota final de su oscuro mandato ha sido el "caso Neymar", donde se sospecha que el club pagó casi 40 millones de euros más por la estrella brasileña.
Es un asunto muy sucio, en el que se observan los manejos contables de entidades deportivas que no son sociedades anónimas deportivas, circunstancia que ha alertado a la propia Unión Europea, que está dispuesta a meter mano a las cuentas de los principales clubes españolas.
Su dimisión deja a un club en situación de inestabilidad política y deportiva en algunas secciones deportivas y deja dañada la imagen institucional de la entidad. Quizás no merecía este final pero la primera lección que te deja el deporte es que la memoria es muy frágil. Los héroes se convierten en villanos de un fin de semana a otro. Con su salida deja muchos interrogantes en el aire. Esperemos, por el bien del Barça, que todo se aclare y disfrutemos del buen deporte en todas las secciones del Barça. Rosell ya es historia pero la institución sigue. Ojalá tengamos un buen final de temporada y podamos ver ganar la quinta Copa de Europa culé. Por soñar que no quede... 
 

domingo, 19 de enero de 2014

Javier Fernández, el mejor patinador español de la historia

Javier Fernandez at the 2010 World Championships (1).jpg
Madrileño de nacimiento, abulense de adopción y residente en Toronto (Canadá), Javier Fernández, a sus 22 años se ha convertido, por derecho propio, en el mejor patinador español de la historia. Este fin de semana, en Budapest, conseguía su segunda medalla de oro consecutiva en el Campeonato de Europa de patinaje artístico. Es un excelente presagio para los Juegos Olímpicos de Sochi (Rusia) que comienzan en un par de semanas, una cita para la que Javier se ha preparado a conciencia y en la que optará a una medalla olímpica.
Emociona verle patinar sobre todo quien conoce su vida de superación personal. Este grandísimo patinador tuvo que hacer las maletas hace unos años e irse de España para entrenar en Canadá, donde hay cultura de patinaje artístico. Sinceramente, ser campeón de Europa o ser medallista en un Mundial de patinaje siendo español es tan difícil como ser figura del toreo para un ucraniano.
Tengo especial simpatía por personajes como Javier Fernández, un hombre que pone ilusión, pasión en cada actuación. Patina de lujo pero, sobre todo, transmite amor por su deporte. Su cara sintetiza el amor por todos aquellos que sentimos el deporte muy dentro.
Decía Girandoux que "el deporte delega en el cuerpo algunas de las virtudes más fuertes del alma: la energía, la audacia, la paciencia". Ver patinar a Javier es todo un lujo del que muchos españoles nos sentimos muy orgullosos. Él será en Sochi una las pocas opciones de medallas de nuestra delegación. Sería una medalla ganada a pulso de un deportista que merecería portadas en los periódicos deportivos españoles. No es nada fácil lo que hace, pero dignifica su deporte como nadie. Esperemos que nos siga dando buenas noticias en unos Juegos Olímpicos de invierno del que solo tendremos noticias en las colas de deporte de los telediarios. España necesita mucho de deportistas como Javier, sin lugar a dudas, el mejor patinador sobre hielo que hemos tenido en toda nuestra historia.

La leyenda del Dakar

Nani Roma gana su primer Dakar en coches
Quien ama el deporte y el mundo del motor sabe que, cada año, por Navidad, tiene una cita inexcusable: el Dakar. Este histórico rally forjó su leyenda en las dunas africanas del desierto del Sahara y, desde hace unos años, por la presión de Al-Qaeda, se trasladó a Sudamérica. Argentina, Bolivia, Chile, el desierto de Atacama acogieron, con los brazos abiertos, a un evento deportivo que mezcla competición con leyenda.  
Este año, además, los españoles ganaron las dos categorías principales: los coches con Nani Roma y las motos con Marc Coma, un doblete que marca un hito más en la historia de nuestro deporte. Coma gana su cuarto Dakar y Nani Roma ha firmado el más difícil todavía: a su victoria en motos, en 2004, suma su primera en coches, algo que solo lo había conseguido su gran rival de este año: Stephan Peterhansel, el mejor piloto de la historia del Dakar con 11 triunfos.
Las lágrimas de Roma dicen mucho de la dureza de esta prueba. El desierto no perdona a nadie y si no que se lo pregunten a Carlos Sainz que, de nuevo, se retiró como consecuencia de una accidente de tráfico. Ganar una prueba de este nivel solo está destinada a unos cuantos elegidos, una serie de pilotos que han hecho de su profesión una forma de vida. Peligro, emoción, resistencia al límite de las posibilidades físicas y mentales son algunos de los rasgos que deben tener los grandes supercampeones del Dakar.
Me alegro mucho por Coma, por Laila Sanz, decimosexta en la clasificación general de motos, pero, especialmente por Roma, un hombre que cambió hace años de categoría, de motos a coches, para completar el ciclo del mejor piloto español de rally con el permiso de Carlos Sainz.
Un año más hemos disfrutado del Dakar, donde se sintetiza todo aquello que nos hace amar el deporte: una mezcla de leyenda, de competición, de emoción, una forma de entender la vida, con un espíritu de superación constante.
Siempre me gustará el Dakar, a pesar de que, muy probablemente, nunca pueda ver una prueba en directo. Son esas cosas que te gustaría ver alguna vez en la vida, como una carrera de Fórmula 1 en Mónaco, una final de Winbledon, la final de un Mundial de fútbol, los 100 metros lisos de una prueba olímpica, la final de una NBA y así un largo etcétera de cosas con las que has crecido.
Somos lo que hemos vivido y con quien hemos vivido y yo amo al Dakar desde que tengo uso de razón.
 

lunes, 13 de enero de 2014

Cristiano y el Balón de Oro


Cristiano Ronaldo ha ganado esta tarde su segundo Balón de Oro con todo merecimiento. Si se premia al mejor jugador en el último año, pienso que éste ha sido Cristiano Ronaldo, el único jugador que puede aproximarse, en estos momentos, en calidad futbolística a Leo Messi. Siempre me ha emocionado ver a alguien expresar con tanta sinceridad el agradecimiento hacia todos los que le han ayudado a conquistar una meta. Las lágrimas en público hablan de sentimientos muy interiorizados, de muchas luchas ganadas en silencio, a veces entre la incomprensión de muchos, de satisfacción por los sueños consumados, a pesar de que muchos dijeron que éstos serían inalcanzables. Me da la sensación que esas lágrimas hablaban mucho de todo esto, de toda una batalla interior ganada al destino y a muchos prejuicios.
Por todo eso felicito a Cristiano, un extraordinario jugador de fútbol que tenemos el privilegio de disfrutar en España. Le felicito, además, por haber aceptado de buen grado la victoria, sin altanería ni chulería. Resarce esta actitud, en parte, el desprecio de otros años a acompañar en la gala FIFA a otros ganadores tan legítimos como él. Por eso me parece un talante excepcional la postura de Messi, su presencia en la gala, a pesar de no ser el favorito en las quinielas. Habla mucho de su madurez como profesional y como persona del que considero el mejor jugador del mundo y del mejor jugador que he visto sobre un terreno de juego, con permiso de Maradona.
Me da mucha pena, asimismo, por todos aquellos jugadores españoles que han merecido como nadie este galardón. Hombres como Xavi o Iniesta, dos veces campeón de Europa, campeones mundiales con sus selecciones y su club, otras tantas veces campeones de Liga, de Copa, de Champions, de Mundialito de clubes y así un largo etcétera. Por muchísimo menos se llevaron el premio Sammer, Canavaro, Papin y otros tantos tipos que sacaron jugo a un buen verano con su Selección nacional.
Está claro que no hemos sabido trabajarnos mediáticamente a los votantes del Balón de Oro porque más y mejor no se puede hacer para llevarse un trofeo que España merece como nadie en los últimos años. La vida es así. Quizás tengamos que ganar un segundo Mundial para llevarnos un trofeo que prestigia al fútbol del país que lo consigue. Tiempo al tiempo.
Mientras todo eso sucede, disfrutemos de los mejores jugadores del mundo, que juegan en nuestra Liga  y reflexionemos sobre la naturaleza del ser humano. Ver llorar, con sinceridad, a hombres como Pelé o Cristiano al recoger sus premios, me invita a pensar en que todos, por grandes o humildes que seamos, seguimos teniendo sueños, objetivos por conseguir. Solo hay que esperar a que se cumplan algún día, para poder disfrutarlos con todos aquellos que quieres y admiras, te llames Cristiano Ronaldo o Perico Pérez.

martes, 7 de enero de 2014

Réquiem por Eusebio, la "pantera negra".

Eursebio, durante el Mundial de Inglaterra en 1962.
Si había un jugador emblemático en la historia de Portugal ese era, sin lugar a dudas, Eusebio, la "pantera negra" del fútbol mundial. Elegido por la IFFHS como el noveno mejor jugador del siglo XX, ganador de un Balón de Oro en 1965 y la Bota de Oro en 1966 y 1973, además de ser el líder de la selección portuguesa del mundial de 1966, donde los lusos quedaron en tercera posición, Eusebio da Silva Ferreira era, sobre todo, el icono del futbol portugués, por encima de Figo y Cristiano Ronaldo, los otros dos grandes jugadores portugueses, también ganadores de la Copa de Europa y del Balón de Oro.
A diferencia de estos dos últimos, Eusebio sí cosechó grandes éxitos para la selección portuguesa y, también a diferencia de Cristiano y Figo, toda su carrera, salvo el final que se marchó a México y EEUU, se desarrolló en Portugal, en el grandioso Benfica de los años sesenta. Es el club portugués más importante y Eusebio era su bandera.
Coetáneo de Pelé y Alfredo di Stéfano, protagonizó, junto a ellos, la dorada época de los años sesenta. Era un fútbol directo, menos físico y menos táctico, pero mucho más dinámico. Los partidos eran eléctricos y entretenidos, muy alejados de estos partidos tácticos, que se juegan en un pizarra o se deciden en un penalti injusto.
Era un fútbol romántico, donde los grandes jugadores sentían los colores de su camiseta y hacían toda su carrera deportiva defendiendo la misma elástica: Kubala la del Barça, Di Stefano la madridista, Pelé la del Santos y Eusebio, la del Benfica.
Con su muerte, este fin de semana, se ha ido una forma de entender el fútbol y se ha ido el verdadero icono del deporte en Portugal. Eusebio era su mejor embajador, querido y respetado por todos. Jugadores como Eusebio faltan en el mundo actual. Portugal, el Benfica se quedan huérfanos de su mejor deportista y todos los que amamos el fútbol tristes por despedir a un hombre que dignificó con su actitud el deporte rey.