Cuando se ha pasado la primera semana de los Campeonatos del Mundo de natación de Barcelona 2013 el balance para la delegación española no puede ser más prometedor: 9 medallas, 7 de las cuales han sido para la natación sincronizada, una plata para Melani Costa y un bronce para Mireia Belmonte. Confío que mañana mismo el palmarés siga engoradando sus cifras con Mireia y Melani, las dos únicas posiblidades de medalla con la que cuenta la delegación española de cara a los últimos días de competición.
Mereia Belmonte sigue escribiendo con letras de oro la historia de nuestra natación. A sus dos platas olímpicas se une su primera medalla mundialista en los 200 metros estilos, una prueba en la que no estaba entre las favoritas. Hoy ha quedado cuarta en 1500 metros y se espera que pueda conseguir metal en 800 metros y 400 metros estilos, quizás sus dos mejores pruebas.
Hablar de Mireia es hablar de una mujer que con 15 años ya se empezaba a codear con la élite mundial de la natación y, sin lugar a dudas, es hablar del presente y del futuro de las aspiraciones españolas de medalla en los futuros grandes campeonatos.
Es una nadadora profesional y solvente que ha pasado un mal año hasta que consiguió patrocinio para seguir con su carrera deportiva. Emociona mucho su profesionalidad y su forma de competir, incansable desde la primera brazada. También es admirable su humildad a pesar de que estamos hablando de la mejor nadadora española de todos los tiempos y su forma de plantear los campeonatos.
Me alegro mucho por ella, porque está disfrutando de las mieles del triunfo en su ciudad natal que le rinde homenaje a cada acto que realiza. También me alegro por Melani Costa, una nadadora extraordinariamente simpática y profesional que está firmando el mejor campeonato de su vida. Su actitud dignifica nuestra natación y nuestro deporte. Es amable con los medios, cercana, ambiciosa cuando se lanza a la piscina. A ello se une su juventud y su proyección de cara a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.
La mala noticia para ambas es que compiten contra quizás la mejor nadadora de la actualidad con el permiso de Miss Franklin. Se trata de Ledecki, una estadounidense de 16 años que gana oros y bate records mundiales con una facilidad pasmosa. Todo será seguir luchando y seguir soñando como hacen Melani y Mireia. Y que les quiten lo "bailao" porque su futuro es absolutamente prometedor.
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