De Tito a Tata

Por fin el FC Barcelona tiene nuevo entrenador. Se trata de "Tata" Martino, el que fuera entrenador de la Selección de Paraguay en el Mundial de Sudáfrica y de Newell´s Old Boys, equipo con el que ha sido el último campeón del Torneo Final de Argentina.

Con la Selección paraguaya quedó finalista de la Copa América en 2011 y cuartofinalista en el Mundial de Sudáfrica 2010, donde fue eliminada por la España que después sería campeona del Mundo. Con Newell´s Old Boys ha sido campeón de Liga y semifinalista de la Copa Libertadores. Además de ello, el Tata Martino acumula otros tantos títulos con los equipos paraguayos Libertad y Cerro Porteño.

Es un currículum extenso que tengo dudas que le sirva para pilotar la nave blaugrana. Si bien es cierto que es admirador de Pep Guardiola y del juego bonito, no lo es menos que viene avalado por Leo Messi, una tara que considero peligrosa a la hora de gestionar un vestuario.

Ahora el Barça tiene un nuevo jugador que es Neymar, al que se le deben poner todo tipo de facilidades para integrarse en el grupo. Es un estrella casi al nivel de Messi y dudo de la gestión del vestuario de un entrenador que esté tan vinculado personalmente con Messi y con su padre que, a su vez, es representante del astro argentino.

Por lo demás, condidero que el Tata Martino carece de experiencia en Europa. Ha habido entrenadores sudamericanos excelentes que fracasaron en España. Por poner dos ejemplos: Luxemburgo en el Real Madrid y Parreira en el Valencia. Eran dos excelentes entrenadores que habían ganado todo en América y que salieron por la puerta de atrás en Europa.

En el Barcelona entrenó Menotti que luego lo hizo en el Atlético de Madrid con más sombras que luces, a pesar que Menotti venía con el título de campeón del Mundo con Argentina en 1978. Es un mal precedente sin duda.

Eso sí, parece que el Tata Martino es pasional y de verbo fácil lo que dará juego a los periodistas en la rueda de prensa. Yo preferiría un buen entrenador en el campo y no en las ruedas de prensa. Solo tenemos que recordar a Mourinho para saber que es preferible un entrenador discreto y eficiente que locuaz e incompetente.

Lo malo de todo esto es que el Barça ha perdido un mes precioso. Ahora no se sabe si se necesita un central, un lateral o un centrocampista. Mucho me temo que como no se ponga manos a la obra desde ya el Barça volverá a esos tiempos donde el entrenador no se comía el turrón.