Intensidad, emoción, rivalidad son algunos de los adjetivos de un fin de semana deportivo impresionante. Entre lo mejor, el derbi ganado a domicilio por el Atlético de Madrid en el Santiago Bernabéu. El Atlético es un equipo de fútbol con todas las consecuencias: está bien organizado, bien planificado, juega al fútbol con intensidad, se cree lo que hace y puede hacer grandes cosas en la Liga y la Champions League. Por el contrario, el Real Madrid parece un equipo hecho a golpe de talonario y va a tener difícil generar un estilo futbolístico con la presión añadida que comporta una temporada en la que el Real Madrid no puede fallar.
En el Mundial de Hockey sobre patines España ganó su quinto mundial consecutivo y debería ser firme candidato a ganar el Premio Príncipe de Asturias del deporte. Es el mejor equipo del mundo desde hace una década y merece un premio acorde con el nivel competitivo que atesora. Es un deporte que ha dado y seguirá dando mucho a España y sólo quedaría convertirlo en deporte olímpico, aunque fue exhibición en los Juegos Olímpicos de Barcelona.
En el Mundial de ciclismo dio mucha pena dejar escapar el oro por el egoísmo de Alejandro Valverde. En ediciones anteriores su problema era Oscar Freire y en éste fue Purito Rodríguez. Dejar que Ruiz Costa fuera campeón del mundo delante de sus narices le deja en evidencia para un futuro. Siempre creí en Valverde, creí en que sería uno de los mejores corredores de la historia del ciclismo español pero me decepcionó mucho cuando fue suspendido por dopaje. Ahora es un corredor con 5 medallas mundialistas aunque le falta el oro. El ciclismo es un deporte colectivo y, a veces, es necesario arrimar el hombro para que un compañero sea campeón del mundo. Purito merecía ser campeón y Valverde le dejó tirado en la última curva. Nunca vi llorar de decepción a un ciclista como Purito y eso denotaba mucha rabia interna ante el egoísmo de Valverde.
Para finalizar, el Mundial de motociclismo y la polémica Pedrosa-Márquez. Está claro que, salvo catástrofe, Márquez será el nuevo campeón del mundo de Moto GP y eso duele mucho en el entorno de Pedrosa, un piloto con infinita mala suerte al que sus mejores días de gloria están pasando.
Pedrosa tiene muy pocas oportunidades de ser campeón del mundo ante la progresión de Márquez y la madurez de Jorge Lorenzo. Siempre fui su fan número uno pero creo que su tiempo ha pasado y pasará a la historia como un piloto brillante al que le faltó el título mundial en la máxima categoría. La era Márquez ha comenzado y tengo la sensación que su reinado será largo y muy exitoso para bien de toda la afición española.
Me encantan estos fines de semana pegado a la tele y a la radio disfrutando del humilde placer de ver y escuchar la emoción del deporte. Y eso que la temporada acaba de comenzar....
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